Una noche casi sin dormir: nervios, expectación y al final todo salió a pedir de boca. Una nueva etapa. Nuevos amigos. Dedicación a lo que siempre he querido. Y lo mejor: las buenas vibraciones se han quedado en eso, porque ahora no lo intuyo, lo sé. Sé que no podría haber empezado con más buen pie. Sé que esto realmente me gusta. ¡Bonjour, vida universitaria!
♫ Everything is gonna be alright...